Hoy mi niño cumple un año… ¡UN AÑO! No entiendo cómo ha podido pasar el tiempo tan rápido.

El día de tu nacimiento, Samuel, fue muy diferente de los de Mateo (traumático y desgarrador) y el de Eva (una emoción desbordante): contigo teníamos experiencia y sabíamos cuantísimo se puede llegar a querer a una personita. Contigo, sólo de pensarlo, se nos caían las lágrimas en la sala de dilatación. Contigo, sólo de pensarlo, nos reíamos a carcajadas en el paritario imaginándonos cómo sería viajar con un pequeñín más.