Este noviembre, durante nuestro viaje a Tokio, decidimos darle una alegría a los niños y visitar Disneyland. Es importante crear buenos recuerdos y hacer planes interesantes también para ellos: de este modo seguirán adorando recorrer el mundo con sus padres.
Además, se juntaba la Navidad con el 35 aniversario del parque, y eso es mucho…
1.- Datos acerca de Tokyo Disneyland
Fundado en 1983 se trata del primer parque Disney construido fuera de Estados Unidos. Junto a Tokyo Disney Sea (ubicado muy cerca), se trata del parque temático más visitado del mundo. Esto en mi opinión se aleja bastante de ser una ventaja pero para ellos es fantástico, claro.
Abren a diario de 8:00 a 22:00 y suelen tener lleno completo incluso en temporada baja (nosotros fuimos un martes de noviembre lluvioso y estaba completo) de modo que os recomiendo encarecidamente que compréis las entradas con antelación. De este modo os ahorraréis la cola de acceso y la posible ida en balde.
El precio de la entrada es de:
- 7.400 yenes para los adultos (59,30 euros).
- 6.400 yenes para los niños entre 11 y 17 años (51,30 euros).
- 4.800 yenes para los niños con edades comprendidas entre los 4 y los 11 años (38,50 euros).
- Los menores de tres años acceden gratuitamente.
2.- Los contras del parque
Básicamente es uno: la masificación. Hay tanta gente y las colas son tan largas que al final terminamos montando en muy pocas atracciones. Un niño pequeño no aguanta 90 minutos de cola para disfrutar los 5 que dure la atracción. También hay que esperar para ir al baño, para comer o para ver las cabalgatas. ¡Llega a ser un poco desesperante!
Mi consejo: id mentalizados y sin agobios. Disfrutad del impresionante decorado, los personajes y la amabilidad de todo el personal.
Si tenéis oportunidad comprad el FASTPASS. Sin duda merece la pena. Cuando nosotros llegamos ya no quedaban, así que pelead por el vuestro con uñas y dientes.

Había MUCHA gente. No obstante son tan educados que no había problema para ver las cabalgatas, ¡nadie empujaba ni se levantaba!
3.- Los pros del parque
¿¡Qué os voy a contar de Disneyland!? ¡Si en cuanto vimos la puerta de entrada casi se me sale el corazón del pecho y me echo a llorar de la emoción!
- Si sois amantes de Disney os encantará: la ambientación es maravillosa.
- El personal NO puede ser más amable. Se les junta que son japoneses y que están en el lugar más feliz del mundo.
- Al igual que el resto de Japón, es increíblemente seguro. Nosotros dejábamos el carrito con compras e incluso la cámara durante horas sin ningún miedo.
- Son TAN organizados y respetuosos que por muy lejos que estéis de los desfiles o espectáculos conseguiréis ver sin problema y nadie os empujará o interrumpirá la visión levantándose. Igualito que las cabalgatas en España, ¿verdad?

Los caballitos y las tazas de Alicia tenían una cola de sólo 15 minutos. Les gustó tanto que repetimos

Midieron a Eva y como superaba los 90 cm le pusieron la pulserita con la que podía montar en atracciones de “mayor”
4.- Consejos para visitar Tokyo Disneyland
- Podéis llegar cómodamente en metro. Está muy bien comunicado.
- Escribid en las manos de los niños vuestro teléfono o ponedles una pulsera identificativa. Esto es extrapolable a muchos otros lugares, pero hay mucha gente y hablan otro idioma.
- Lo primero que vais a ver es Bazaar World, llena de tiendas en las que os apetecerá comprarlo TODO. Tenéis mucho día por delante, esperad un poco para arrasar.
- Comprad el FASTPASS. Nosotros pecamos de novatos y para cuando quisimos hacerlo ya no quedaban.
- Llevad picoteo y agua para los niños. Hay muchos puestos y restaurantes, pero os salvará en más de una ocasión.
- NO os metáis en la atracción Stitch Encounter. Se trata de un vídeo interactivo en japonés.
- Las colas son mucho más cortas durante las cabalgatas y espectáculos, pero también es una pena perdérselos porque son muy divertidos para los niños. Valorad qué os apetece más.
5.- Nuestra experiencia
En total montamos en unas 7 u 8 atracciones, comimos en dos restaurantes (y picoteamos palomitas de chocolate), vimos dos cabalgatas (la diurna y la nocturna de luces), el espectáculo de proyección y fuegos artificiales del castillo de Cenicienta y compramos un montón de recuerdos preciosos.
Nos desanimó un poco tener que hacer tantas colas, no recordaba esta experiencia cuando fui con mis padres a Disneyland Paris. Aunque de nuevo me fallaba la memoria: 25 años después ellos me explicaron que sí, que hicimos colas más largas que un día sin pan.
Los niños, aunque lo recuerdan con mucho cariño, siguen hablando de AsoBono como lo mejor de Japón. Es una experiencia que hay que vivir con ellos al menos una vez en la vida aunque puede que un poquito mayores para que lo disfruten más. Simplemente coincidió así.
¿Habéis estado en Disneyland? ¿Qué recuerdos tenéis?
Sara Illana
¡Qué maravilla!
It’s a small World era mi favorita de pequeña (y la pesadilla de los padres)
Pero este año, a nuestros 30 y tantos, pudimos volver mi marido y yo y volvimos a caer! Cualquier parque Disney es un planazo hasta para los adultos! Y el merchandising que tienen está taaaan currado ♥️
Cantando nanas
Yo tenía claro que durase lo que durase la cola teníamos que verlo… ¡Qué emoción! Y a los niños les encantó, debe de ser genético… Y lo del merchandising es mucho… Rompimos nuestra regla de no comprar cosas que no cupieran en la maleta y nos volvimos un poco locos.